Resumen
Este trabajo analiza las largas consecuencias del terremoto de 1692, acaecido en Port Royal (Jamaica), desde la perspectiva del desorden que ocasionó. Eventos destructores de tal magnitud suelen ir asociados a situaciones de enorme caos que alteran la cotidianidad de una sociedad, perturbando un orden preexistente. Ello acaeció el 7 de junio de aquel año, cuando se produjo uno de los sismos más devastadores de la historia del Caribe. Tras este, las autoridades locales de la Jamaica inglesa hubieron de hacer frente a una serie de amenazas que desafiaron el orden político, social y económico vigente. A través de la puesta en marcha de un conjunto de medidas y estrategias, estas trataron de aminorar sus peligrosos efectos, a corto y largo plazo. Entre estos, se encontraban el estado de anarquía más inmediato, el estallido de una rebelión de la población esclavizada, el ataque extranjero o la insalubridad. No sería hasta 1722 cuando, tras un nuevo desastre, Port Royal perdería definitivamente su categoría de ciudad y puerto preponderante en la isla, en favor de Kingston, siendo tal fecha el cierre de la presente investigación. Por me-dio del análisis de fuentes de consideración diversa, se pretende identificar de qué modo las autoridades locales percibieron aquel desorden suscitado y qué medidas implementaron en defensa de sus intereses y de su posición social.
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Derechos de autor 2025 Gonzalo Ramírez Sánchez