Resumen
Este artículo parte de examinar la fuerza de lo que puede considerarse como el embrujo racial y los escozores que genera el concepto raza. El que algunos colegas consideren que debe ser sustituida la palabra raza por términos que no apuntalen el racismo como grupo étnico o cultura, es una expresión de sensibilidades teóricas y políticas que ameritan ser abordadas. No es simple ceguera ideológica de la que estarían exentos otros colegas que abogan por la relevancia de no abandonar raza en el análisis. Racialización, etnización y blanquidad se abordan en sus especificidades, desde una labor teórica necesaria para interrumpir no pocos lugares comunes. Entender sus distinciones y particulares anudamientos es lo que busca la segunda parte de este artículo. No toda diferencia como jerarquía supone marcaciones racializadas ni racismo, así como la apelación a la diferencia cultural no garantiza que se no se reproduzcan los entrampamientos de las categorías raciales.
Finalmente, en este artículo se explora la idea de horizontes de historicidad para complementar el concepto de formaciones nacionales de alteridad, proporcionando una perspectiva histórica que incluye las anterioridades de la nación. Este enfoque permite entender las articulaciones entre los procesos de formación de la nación y sus antecedentes históricos, para que desde genealogías más amplias se pueda examinar cómo estos han influido en cómo hemos llegado naturalizar hoy ciertas diferencias/desigualdades.
Esta obra está bajo una licencia internacional Creative Commons Atribución 4.0.
Derechos de autor 2025 Eduardo Restrepo